HABÍA UNA VEZ...

Era noviembre del 2006 cuando la Red Latinoamericana de Cuentería “Oralidad y Memoria de los Pueblos” gestionó e inició el apoyo para la profesionalización de narradores orales escénicos en Paraguay.  En febrero del 2007 se torna realidad el Primer Festival Internacional de Cuentos con participación de  representantes de Colombia, Chile, Argentina, Uruguay, Bolivia y Perú.  Paraguay iniciaba en ese marco la formación, profesionalización y a la par el ejercicio del oficio narrador.  El público paraguayo se vio reflejado en el escenario, en cada cuento, en cada mirada y nos estimuló a seguir creciendo. 

Desde ese entonces, los narradores orales escénicos “los cuenteros” estamos trabajando en el arte de la palabra, en el arte de recuperar “nuestra palabra”, de devolver la mirada y la capacidad de imaginar, no sólo a los niños/as como siempre se acostumbra a relacionar a los cuentos, sino también los jóvenes y a los adultos que ejercen con este arte, el derecho a seguir soñando.

En este andar inicia su aporte a este país el Grupo de Mujeres Narradoras “Artesanas de la Palabra”. Mujeres que con pasos lentos pero seguros fueron abriendo espacios de cuentos para niños, para adultos, llevando la imaginación y creatividad a instituciones educativas, bibliotecas, cooperativas, plazas, y donde exista un oído ávido de cuentos y un corazón abierto para revitalizar la palabra.  

Artesanas de la Palabra abrió sus alas y desplegó vuelo también hacia los diferentes países de Iberoamerica.  Surge así el Encuentro Internacional de Oralidad en Paraguay homenageando con admiración al Maestro RUDI TORGA de quien hemos adoptado su poesía como lema y como compromiso “LA PATRIA QUE LATE EN MI”.  Hoy podemos afirmar con alegría que “somos parte de esta historia de la narración oral  escénica en Paraguay”. 

Nos place y nos enorgullece sentir que aportamos nuestro grano de arena en este país.  Sembrando esperanza, valor, equidad, imaginación, identidad, creatividad.  Sembrando con cada cuento, con cada mirada, con cada gesto, con cada puesta en escena y estrechando lazos con sembradores de la palabra de otras tierras.

Amigos/as abrimos el telón...y QUE VIVA LA PALABRA QUE SIEMBRA RAÍCES Y QUE NOS HACE VOLAR CON ALAS DE CUENTO.

LAURA FERREIRA

Directora del Encuentro de Oralidad